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Ciencia inclusiva para la seguridad del agua: una visión más comprensiva de la ciencia para avanzar en una Agenda de Acción Conjunta sobre el Agua

El agua es fundamental para la vida y es un elemento transversal para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas. La ciencia, y más concretamente la Ciencia Inclusiva, es una base clave para la toma de decisiones informadas sobre la gobernanza y la gestión de los recursos hídricos a todos los niveles. Esta práctica conceptual y orientada a la acción de la investigación científica y la innovación abarca los avances innovadores de la 4ª Revolución Industrial, incluida la inteligencia artificial, pero también los conocimientos ancestrales y tradicionales, en los que se basa un importante conjunto de tecnologías.
Manos de hombres y mujeres unidas sobre mapa

Como ha destacado recientemente la Ministra de Obras Públicas de Chile, Jessica López, "la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua 2023 terminó recibiendo cientos de compromisos para acelerar el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible nº 6 sobre el derecho humano al agua potable, el saneamiento y la higiene y la gestión sostenible del agua; y paralelamente a la Plenaria, hubo más de 200 eventos paralelos, incluido uno sobre Ciencia Inclusiva para la Seguridad Hídrica".

La investigación científica y la innovación, junto con la capacitación y la educación, asumen un papel destacado a la hora de proporcionar a los responsables de la toma de decisiones herramientas fundamentales y vías orientadas a la búsqueda de soluciones para una gestión integral y eficiente del agua.

Los países se enfrentan prácticamente a los mismos retos en materia de seguridad hídrica, y ninguno dispone de todos los recursos financieros y técnicos, ni de las capacidades de implementación, para resolver por sí solo todos los desafíos identificados. Por lo tanto, para acelerar el programa de transición, resulta indispensable contar con una interfaz eficaz entre la investigación científica, las políticas públicas, los agentes económicos y las necesidades de la sociedad para fomentar comunidades sostenibles y resilientes.

Esto requiere "la disponibilidad de datos abiertos, fiables y accesibles sobre los recursos hídricos y los ecosistemas, garantizando una mayor transparencia y responsabilidad en los esfuerzos de seguimiento de la calidad y cantidad del agua", tal y como se detalla en las Recomendaciones Clave para la Acción del evento previamente mencionado.

El Plan Estratégico para la novena fase del Programa Hidrológico Intergubernamental (PHI-IX), que abarca 2022-2029, impulsa las perspectivas de avance de la agenda del agua a través de la ciencia inclusiva, afirma el Sr. Miguel Doria, Hidrólogo Regional de la UNESCO para América Latina y el Caribe, ya que el plan "identifica las áreas prioritarias clave del agua para apoyar a los Estados Miembros a alcanzar la Agenda 2030 y los ODS, y otras agendas relacionadas con el agua, como el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático, el Marco de Sendai sobre la Reducción del Riesgo de Desastres (RRD) y la Nueva Agenda Urbana (NUA)".

Miguel Doria señaló además que, durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua, la UNESCO propuso una evaluación mundial de base científica que podría cambiar las reglas del juego para alcanzar los objetivos mundiales en materia de agua.

Aprovechar y conectar los programas, datos de investigación y conocimientos existentes permitirá un mejor acceso a las innovaciones, reduciendo las diferencias entre "lo conocido y lo desconocido".

Esto será fundamental para situar los problemas del agua en la vanguardia de los procesos de sostenibilidad mundial, proporcionando a los responsables de la toma de decisiones diagnósticos y soluciones precisas para acelerar la Agenda de Acción para el Agua, como el ODS17 "Fortalecer los medios de implementación y revitalizar la Asociación Mundial para el Desarrollo Sostenible", el ODS6 "Garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos", y el ODS13 sobre "Acción por el Clima", marcando así una diferencia palpable en el respaldo a la seguridad hídrica mundial.