Costa Rica se compromete con la protección de bienes culturales en caso de conflicto armado

A partir de octubre Costa Rica sumó dos edificaciones más a la lista de locaciones protegidas por el Escudo Azul, emblema que según la Convención de la UNESCO de 1954 identifica la protección de bienes culturales en caso de conflicto armado. 

Esta Convención, conocida como Convención de La Haya, junto a sus dos protocolos, constituye un instrumento del Derecho Internacional Humanitario, que establece mecanismos para la identificación y señalización de bienes y sitios culturales ante la eventualidad de un conflicto armado, con el fin de que se mantengan al margen de las hostilidades.  

La Comisión Costarricense de Derecho Internacional Humanitario (CCDIH), con apoyo de la Cruz Roja Costarricense, ha demostrado su compromiso con la implementación de estas disposiciones mediante la colocación del Escudo Azul en edificios históricos del Costa Rica con alto valor cultural. 

De este modo, el lunes 9 de octubre, día mundial del Correo, la UNESCO participó en el acto de develación del Escudo Azul en la fachada del Edificio Central de Correos y Telégrafos de Costa Rica. El jueves 19 de octubre, la UNESCO también participó en la develó de uno más en el Teatro Nacional de Costa Rica. Estos se suman a otros que han sido colocados anteriormente en sitios históricos, museos y repositorios de archivos de alto valor cultural en el país. 

La Convención de 1954 confiere un sistema de protección para los bienes culturales que el Estado designe. Su implementación refleja la voluntad de Costa Rica de abstenerse de cometer actos de hostilidad en contra de los bienes culturales, prohibir y evitar cualquier acto de pillaje, robo y vandalismo, así como no exponerlo a situaciones de deterioro o destrucción, inclusive ante la eventualidad de desastres por fenómenos naturales y el cambio climático. 

La UNESCO sostiene que el patrimonio cultural es una herramienta potente la construcción de una cultura de paz, para la cohesión social y para alcanzar los Objetivos de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible. En tiempos de paz, el Escudo Azul refleja el rol del patrimonio cultural para la prevención de conflictos armados y para la promoción y defensa de los principios y valores humanitarios.