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La tecnología digital es un instrumento clave para mejorar la alfabetización de las niñas y las mujeres

UCSP

El desafío mundial de la alfabetización sigue estando marcado por el género. En todo el mundo, 763 millones de adultos y jóvenes, dos tercios de los cuales son mujeres, siguen sin saber leer ni escribir. La brecha de género en la alfabetización es el resultado de un acceso desigual a la educación básica, que luego se convierte en la causa fundamental de la desigualdad de género en la participación en la educación y otras actividades socioeconómicas. La alfabetización es la base del aprendizaje y la palanca de la participación socioeconómica y el empoderamiento, en particular de las mujeres y las niñas.

El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer de 2023, se celebrará bajo el lema “Innovación y tecnología para la igualdad de género”. La celebración permitirá analizar las repercusiones de la brecha digital de género y promover las innovaciones digitales más creativas que satisfagan las necesidades de las mujeres y hagan avanzar la igualdad de género. Con motivo del Día Internacional de la Mujer de este año, queremos compartir cómo las antiguas galardonadas con los Premios Internacionales de Alfabetización de la UNESCO siguen trabajando para alcanzar su objetivo de empoderar a las mujeres mediante la alfabetización y sus opiniones sobre las oportunidades y los retos que presenta la digitalización en la alfabetización de niñas y mujeres.

La Dirección de Alfabetización y Educación de Adultos del Ministerio de Educación Nacional de Níger, fue galardonada con la Mención Honorífica 2012 del Premio de Alfabetización Rey Sejong de la UNESCO por su “Programa de Alfabetización Funcional para Mujeres y Niñas”. Esta iniciativa sigue ampliándose, año tras año, desde que recibió el premio. Cada año, la Dirección apoya la apertura de más de 100 centros de alfabetización, lo que permite alfabetizar al menos a 6.000 mujeres.

La Asociación para la Promoción de la Educación No Formal en Burkina Faso (BF-APENF), galardonada con el Premio de Alfabetización Rey Sejong de la UNESCO en su edición de 2014, explicó que, debido al éxito del programa premiado, que combina la alfabetización y el desarrollo de capacidades en materia de salud y finanzas en un entorno de educación no formal para promover el desarrollo sostenible de las mujeres, ha sido reconocida como especialista en proporcionar una educación alternativa de calidad y ha capitalizado su experiencia para apoyar la puesta en marcha de varios programas de educación no formal a escala nacional e internacional.

La Asociación Argelina para la Alfabetización “IQRAA” fue galardonada con el Premio UNESCO-Confucio de Alfabetización en su edición de 2014 por su programa “Alfabetización, formación e integración de las mujeres”. La Asociación ha luchado contra la exclusión y la marginación de las mujeres que carecen de las competencias necesarias para acceder a la educación mediante su programa “Alfabetización y cualificación”. El programa pretende ayudar a las mujeres a superar sus dificultades de la vida mediante la alfabetización y otras competencias para la vida, la adquisición de cualificaciones profesionales y la participación en el desarrollo local.

A pesar de la suspensión de su programa “Aprender enseñando” debido a la pandemia de COVID-19, el Centro Universitario de Participación Social de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (México), galardonado con el Premio UNESCO-Confucio de Alfabetización en su edición de 2020, ha proseguido sus esfuerzos mediante la organización de pequeños ejercicios de alfabetización en regiones urbanas. El Centro también ha buscado diversas estrategias para aumentar la participación de niñas y mujeres en las clases de alfabetización, adaptando sus horarios de clases a sus necesidades, concienciando a los miembros masculinos de la comunidad sobre la importancia de que las mujeres aprendan a leer y escribir y apoyando a las alumnas en sus quehaceres cotidianos para que tengan tiempo de asistir a clases.

Las galardonadas señalaron que el avance de la alfabetización y el empoderamiento de las mujeres sigue haciendo frente a numerosos retos, pero también a oportunidades. Uno de los principales desafíos a los que se enfrenta el IQRAA para alcanzar su objetivo de reducir las tasas de analfabetismo en Argelia de aquí a 2024 es concienciar y motivar a los ciudadanos acerca de la importancia de la alfabetización básica. Para ello, se ha previsto un plan de comunicación en el que participan todos los medios de comunicación, las asociaciones y las empresas nacionales.

En México, la prevalencia de la ideología patriarcal y la violencia de género siguen colocando a las mujeres en una posición difícil, alejándolas de la educación. “Las niñas tienen menos oportunidades de acceder a un entorno alfabetizado, desde la primera infancia hasta la edad adulta”, afirmó la Sra. Mirta Isabel Figueroa Fernández, directora del Centro Universitario de Participación Social. Añadió que “las costumbres y tradiciones siguen implicando que las niñas y las mujeres deben dedicar más tiempo a los quehaceres domésticos o al cuidado de los demás”. Sin embargo, destacó el poder transformador de la educación y cómo, mediante el aprendizaje, las mujeres que tienen acceso a la educación pueden tomar decisiones más conscientes sobre su salud, sus relaciones y sus derechos humanos en general.

La BF-APENF destacó que las alumnas siguen teniendo dificultades debido a su limitado acceso a una educación de calidad y a los recursos productivos. A pesar de este reto, el Sr. Abdoulaye Yonaba, secretario ejecutivo de la asociación, afirmó que “las oportunidades que se ofrecen a las niñas y las mujeres son la existencia de alternativas educativas de calidad que les permiten desarrollar competencias básicas, sociales y profesionales”.

Directorate of Literacy and Adult Education

La Dirección Nigeriana de Alfabetización y Educación de Adultos mencionó que, aunque existe un fuerte compromiso político en favor de la educación y la formación de las niñas y las mujeres en el país, los compromisos adquiridos a menudo no se cumplen, ya que la oferta no puede satisfacer la creciente demanda.

Los avances en tecnología digital ofrecen oportunidades para abordar los desafíos educativos. Las tecnologías podrían generar más recursos educativos y llegar a más educandos, incluidos las mujeres y otros grupos marginados. Han surgido muchas prácticas de adopción de tecnologías digitales para promover la alfabetización. Sin embargo, la revolución digital plantea el riesgo de perpetuar las desigualdades existentes.

En cuanto a los efectos provocados por la tecnología digital en la alfabetización de niñas y mujeres, los galardonados coinciden en que la tecnología digital puede mejorar el acceso a la educación y se ha convertido en una herramienta importante para facilitar la alfabetización y el desarrollo de capacidades. Además, el aprendizaje a distancia facilitado por la tecnología permitió la continuidad de los programas de alfabetización durante la pandemia de COVID-19. La Sra. Hatchabi Kouriram Kajima, directora de la Dirección de Alfabetización y Educación de Adultos, recordó que “la tecnología digital puede mejorar el acceso a la educación, pero el acceso a la tecnología digital también requiere la capacidad de leer y escribir”. Como señaló la Sra. Figueroa Fernández, en México sólo el 56% de la población rural tiene acceso a Internet. “Todavía es difícil pensar que la tecnología puede ser la respuesta al problema del acceso a la educación de las niñas y las mujeres”, expresó.

La alfabetización es la base para que todas las personas puedan beneficiarse de las tecnologías digitales. La brecha de género en la alfabetización puede exacerbar la brecha digital de género y conducir a una mayor desigualdad de género en la era digital. Es crucial seguir abogando por políticas, estrategias y prácticas que tengan en cuenta las cuestiones de género, incluidas las que incorporan las tecnologías digitales.

Los dos Premios Internacionales de Alfabetización de la UNESCO son: El Premio de Alfabetización UNESCO-Rey Sejong, creado en 1989, con el apoyo del Gobierno de la República de Corea, que presta especial atención al desarrollo de la alfabetización basada en la lengua materna y el Premio UNESCO-Confucio de Alfabetización, creado en 2005 con el apoyo del Gobierno de la República Popular China, centrado en la alfabetización funcional, aprovechando los entornos tecnológicos, a favor de los adultos en el medio rural y de los jóvenes no escolarizados.