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Salvaguardia del PCI y tecnologías innovadoras en escuelas rurales del Cusco: Valorando la diversidad cultural y el patrimonio vivo

En un esfuerzo por promover oportunidades de aprendizaje significativo y fomentar el reconocimiento, respeto y valoración de la diversidad cultural y el Patrimonio Cultural Inmaterial (PCI), el Centro Regional para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de América Latina (CRESPIAL) emprendió un proyecto piloto denominado "Patrimonio Cultural Inmaterial y Tecnologías Innovadoras en escuelas rurales". Esta iniciativa se llevó a cabo entre 2019 y 2020, y tuvo como resultado una guía metodológica para su aplicación.
Escuelas rurales Cusco

El proyecto se enmarca en las medidas establecidas por la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO en 2003, en apoyo al cumplimiento del objetivo 4 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para el 2030. Su objetivo es desarrollar modelos metodológicos que integren el PCI en la educación, como medio para la preservación del patrimonio vivo.

En 2022, CRESPIAL y UNESCO Perú decidieron implementar la segunda etapa del proyecto, con el propósito de validar la guía metodológica y contribuir a las políticas educativas regionales a través de experiencias replicables. Asimismo, se buscó fomentar prácticas de articulación intersectorial entre cultura y educación en dos instituciones educativas rurales de la región de Cusco, que forman parte del Programa Horizontes de UNESCO Perú.

Escuelas rurales Cusco

Las Instituciones Educativas “Javier Pérez de Cuellar” (Quiquijana - Quispicanchi) y “CPED – 50853 de Lauramarca” (Ocongate - Quispicanchi), ambas de nivel secundaria y mixtas, fueron seleccionadas para el proyecto. En estas escuelas, se trabajó con docentes y alumnos de cuarto año de secundaria.

La implementación del proyecto constó de tres fases: capacitación docente, implementación en las escuelas y evaluación de la experiencia. Durante la capacitación, se brindaron conocimientos básicos sobre los tres componentes del proyecto: aprendizaje basado en proyectos, conceptos sobre patrimonio cultural inmaterial y tecnologías innovadoras.

Las Instituciones Educativas “Javier Pérez de Cuellar” (Quiquijana - Quispicanchi) y “CPED – 50853 de Lauramarca” (Ocongate - Quispicanchi), ambas de nivel secundaria y mixtas, fueron seleccionadas para el proyecto

En estas escuelas, se trabajó con docentes y alumnos de cuarto año de secundaria.

Escuelas rurales Cusco

En las escuelas, se puso en práctica una metodología que permitió sensibilizar a las y los estudiantes sobre el PCI de sus territorios a través de proyectos de investigación extracurriculares, utilizando tecnologías innovadoras como herramienta de documentación y difusión para fomentar la valoración social del PCI. Las y los estudiantes, junto con sus docentes y el equipo técnico de CRESPIAL, caracterizaron el territorio y la cultura viva, y definieron los temas de investigación y proyectos en grupos.

En diferentes sesiones, las y los alumnos documentaron su investigación y diseñaron sus experiencias utilizando la aplicación gratuita Metaverse, con la guía de sus docentes y el equipo técnico de CRESPIAL. Al finalizar el proyecto, se lograron siete investigaciones realizadas, las cuales contribuyen a la identificación y registro de su PCI, así como al proceso de protección, gestión y transmisión de su patrimonio vivo.

Escuelas rurales Cusco

Es importante destacar que la implementación de proyectos de integración del PCI en la educación a través de nuevas tecnologías en zonas rurales presenta desafíos, especialmente en sociedades de América Latina y el Caribe. Estos desafíos incluyen el acceso a dispositivos electrónicos (como teléfonos inteligentes y tabletas), la existencia de una brecha digital en zonas rurales, la calidad de la conexión a internet expuesta a fenómenos climatológicos y la constante actualización de herramientas de tecnología de la información y comunicación con fines educativos.

Finalmente, la aplicación de este proyecto contribuye de manera concreta a conectar a las y los jóvenes adolescentes con su patrimonio vivo, fomentando las relaciones intergeneracionales y desarrollando capacidades de investigación y uso de nuevas tecnologías. Además, promueve el interés por comunicar las características de su expresión o manifestación cultural. En términos institucionales, este proyecto aporta al desarrollo de modelos metodológicos y políticas para la integración entre la educación y el patrimonio cultural inmaterial.